domingo, 25 de septiembre de 2011

The Running Man: Nuevo Orden Mundial Mediático Policial






Resulta curioso que el ex gobernador de California, Arnold Schwarzenegger, fuese el héroe que se rebela victorioso contra un tiránico sistema, que controla completamente los medios de comunicación y crea falsos terroristas de estado ofreciéndoselos en sacrificio a una masa sometida, esclava y estupidizada, en la película The Running Man. Una ochentera cinta de ciencia ficción poco conocida, pero que encierra a su vez preocupantes mensajes. ¿Quien nos iba a decir en 1987, que nuestro futuro iba a tener similitudes tan profundas con las de la angustiosa realidad que impera en esta película? Seguro que muchos de los que contribuyeron a financiarla y supervisarla, aguardaban esta realidad con impaciencia. Ojito con el cine de los años 80, que desvela muchos planes ocultos de la élite que nos gobierna en la sombra.






Desde el minuto 8:50 hasta el 9:15 aproximadamente, no tienen desperdicio las indicaciones y normas que suelta una informante por una gran pantalla, recordando el toque de queda policial, la documentación requerida por los trabajadores o advirtiendo del reclutamiento militar, en el marco de un apoteósico y distópico escenario completamente tecnocrático parecido al de Blade Runner, y también cada vez más al mundo que poblamos. En ciudades del Reino Unido como Edimburgo o Liverpool, ya podemos ver actualmente enormes pantallas montadas en pleno centro urbano con la alienante BBC desinformando a todo trapo, como tuve ocasión de comprobar este invierno pasado.


Lothian's Road (Edimburgo)

Liverpool

¿Será parecido a este, el mundo del mañana?

4 comentarios:

  1. La maquina que cambio el mundo
    18 Octubre 2010 por Guillermo Haro

    Tengo coche pero no lo uso. Un amigo mío fue despedido hace varios meses de su trabajo de director comercial, y se quedo sin trabajo, sin coche y con un enano al que llevar al cole por las mañanas. Me ha hecho un favor, ya que aparcar era una odisea en mi barrio, y me negaba a contratar un parking en alquiler. Y es que no me gusta conducir. Ni siquiera me gustan conducir los coches del anuncio aquel (me hubiera encantado ver la cara del Director de Marketing cuando se entero de que en su anuncio no aparecería el coche…un héroe anónimo el de la agencia). Encuentro más placer y más productividad en el transporte publico, que a determinadas horas es aceptable para poder aprovechar y trabajar, o simplemente leer, por placer o por necesidad.

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  2. Me lo ha comentado mi gran amigo guillermo, es un dios de la economia basura lobito

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  3. No tengo el placer de conocer a ese hombre. El coche en la ciudad es absurdo, siempre que el transporte público funcione correctamente, que en el caso de madrid, es bastante discutible en algunos casos

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  4. De todas formas, que relación guarda este asunto con lo publicado?

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